03 octubre 2010

SUBCAMPEONES
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La temporada 1949-50 fue una de las más exitosas en la historia del Deportivo. Obviando la época actual desde el último ascenso en el año 1991 fue la mejor clasificación del equipo coruñés en el campeonato de liga.
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Y eso que la temporada no empezaba bien, ya que se comenzaba perdiendo en Tarragona por tres goles a dos. En la plantilla coruñesa, entre otros, figuraban los canteranos Acuña, Ponte y Tino; Waldo Botana, coruñés de Rutis que llevaba siete años jugando en el Alcoyano; dos grandes sudamericanos, el argentino Rafael Franco y el uruguayo Dagoberto Moll. De Rafael Franco se decía que debía de llevar en la bota alguna sustancia pues no se entendía que pudiera llevar el balón tan pegado al pie. Veteranos como Marquínez, Carlitos, el joven coruñés José María Martín. El argentino Alejandro Scopelli se revelaría como uno de los mejores entrenadores de la historia del Deportivo.
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El 11 de septiembre de 1949 se inaugura la temporada en Riazor venciendo al Real Madrid por tres goles a cero con dos goles de Marquínez y uno de Martín. El Deportivo acaba la primera vuelta quinto con catorce puntos, siendo líder el Real Madrid.
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El 23 de abril de 1950 tiene lugar la última jornada del campeonato nacional de liga. El Deportivo tiene que jugar en San Mamés frente al Athletic de Bilbao y el Atlético de Madrid, rival para la consecución del campeonato, recibe en su campo, el Metropolitano, al Valencia. Para que el Deportivo quedase campeón de liga tenía que ganar su partido y que no lo hiciese el Atlético de Madrid.
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Y durante 63 minutos, justo de el minuto dos, cuando Rafael Franco bate a Lezama, hasta el minuto veinte del segundo tiempo en que Iriondo bate a Acuña y logra el definitivo empate a dos goles, el Deportivo fue campeón. El Atlético acabaría empatando a cuatro goles en su campo, marcando dos goles de penaltis muy discutibles. El Deportivo quedaría, además de subcampeón, como el equipo menos goleado de la Liga.

3 comentarios:

Titajú dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Titajú dijo...

El comentario era mío, que me salió una falta de ortografía como la copa de un pino.
Ahora corrijo:
¡Ah no! Yo de fútbol no hablo.

millenium dijo...

El fútbol, visto como deporte y con tranquilidad, puede ser bonito e incluso las historias de los clubs de fútbol pueden tener pasajes extraordinarios.

Ahora, eso sí, el fútbol como albergue de extremistas y fanáticos ya no merece la pena.

Soy socio del Deportivo desde pequeño, lo he visto en todas las categorías nacionales.

En cuanto al fútbol en general lo sigo sin más, lo he seguido más hace años, aunque luego, debido a como se toma el fútbol, he llegado a la conclusión de que no se puede hablar de fútbol en el trabajo. Ya pueden surgir distintas noticias que lo "importante" es si pitaron o no un penalty el domingo.